¿Qué pueden tener en común los liberales holandeses y el singular sistema político chino?
Ambos, y por razones muy diferentes, están llevando a cabo campañas de concienciación sobre los entierros ecológicos.
En Holanda, proponen modernizar la Ley Funeraria con el ánimo de favorecer los entierros ecológicos. Su intención es que sean sostenibles para el medio ambiente, sin dejar de atender las necesidades de las personas e innovando en el sector.
Entre las soluciones que se estudian podemos encontrar ideas como mezclar las cenizas de varios seres queridos en una sola urna; reducir el tiempo de las inhumaciones y cremaciones – acelerar dichos procesos y adaptarse a las costumbres de todas las religiones, ya que hasta ahora se les requería un permiso especial para poder celebrar el entierro antes de las 36 horas- y por último, permitir enterramientos en la naturaleza de manera ecológica y biodegradable.
Además, pretenden introducir sistemas innovadores menos conocidas como la Hidrólisis alcalina (como sustituto de la cremación) el Compostaje de los difuntos (descomposición natural del cuerpo) o la Criomación (utilizando el nitrógeno líquido y la congelación para pulverizar el cuerpo mediante vibraciones). Nos suenan utópicos y de hecho, estos procesos aún no son posibles en Holanda pero deja clara la tendencia que el sector funerario (promovido por los políticos) debería seguir.
En el otro extremo del mundo, en China, el Gobierno está difundiendo una campaña de concienciación a favor de la cremación para evitar la reducción de las zonas de cultivo, así como para luchar contra la pobreza en el medio rural. El segundo razonamiento radica en compensar económicamente a aquellas personas que “devuelvan” sus propios ataúdes – ya que es costumbre que la gente mayor compre su propio féretro con antelación- y que inviertan el dinero en un método más ecológico y económico, que es la cremación.
Sea por proteger el medio ambiente o por poder abastecer una creciente población, la tendencia del sector es clara: menos inhumaciones y más métodos alternativos para el último adiós de nuestros seres queridos.